miércoles, 3 de junio de 2020

Las líderes del COVID-19, un "nuevo" estilo de liderazgo

Hola

Leyendo un artículo en el "The New York Times International Weekly" en el periódico Reforma del 23 de mayo pasado: "Lideran mujeres camino a recuperación" me vino a la mente algunas de las clases que di en mi materia de negociación en el Tec Campus Toluca ya hace algunos ayeres. En dichas sesiones platicaba de la importancia - dadas ciertas investigaciones -, para las mujeres el participar y hacerse escuchar en las juntas de consejo o de trabajo con su jefes y pares que en su mayoría - y todavía lo es así tristemente -, eran y son hombres. Ello, para no sólo hacerse presentes y que notaran su presencia sino que tenían algo importante que decir. El no hacerlo para la mente masculina - según dichas investigaciones -, haría que sus superiores y pares (hombres en su mayoría), pensaran que su presencia e importancia no eran relevantes. Ello según estos estudios harían menos probable su consideración para promociones futuras.

En ese artículo que les comento habla de las líderes mundiales actuales y como la mayoría de ellas han hecho de este mundo y sus circunstancias actuales un lugar mejor del que encontraron al ser nombradas primeras ministras en sus países y también, el como han lidiado y atacado las difíciles situaciones a las que hoy nos enfrentamos.

Jacinda Ardern Primera Ministra de Nueva Zelanda, Angela Merkel en Alemania y Sanna Marin en Finlandia comparativamente contra ministros hombres en otros países como Gran Bretaña y Suecia no salen bien librados en su accionar.



Amanda Taub autora de este artículo "Lideran mujeres camino a recuperación", enfatiza que las características fundamentales que han hecho diferente al liderazgo y la forma de liderar de estas brillantes mujeres son opuestas a como se considera y consideraba deben ser los líderes "fuertes", "ajustados a los arrogantes ideales de la masculinidad" y, "en donde existe la expectativa de que los líderes deben ser agresivos, arrojados y dominantes". Y además, que "si las mujeres demuestran esos rasgos, entonces son vistas como poco femeninas. "Eso hace que sea muy difícil para ellas prosperar como líderes" (estas reflexiones realizadas en este artículo por Alice Evans, socióloga en el King´s College London).

Y. ¿Entonces qué han hecho estas extraordinarias líderes?

Lo contrario, un tipo de liderazgo "adverso al riesgo, empático y considerado". Y no sólo eso sino que al ser mujeres, "puede ser menos costoso políticamente adoptar políticas cautelosas y defensivas porque no tienen que violar las percibidas normas de género para hacerlo".

Estamos viendo esos cambios necesarios en un mundo turbulento y lleno de nuevos retos, donde un liderazgo femenino lleno de humanidad, inclusión y comprensión de "los demás", haga de este planeta un mejor espacio para convivir y salir adelante.

¡Bienvenidas  las mujeres - como siempre -, al mundo del liderazgo! ¡Ya nos hacían falta!

Ojalá continuemos viendo y viviendo a más y más mujeres en el mundo organizacional. A mí y al mundo nos hacen falta.

Un fuerte abrazo, les quiere

Enrique






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