martes, 20 de octubre de 2009

Cuarto comentario Liderazgo Maestría Morelia (Covey hábitos 4 a 6)


Nos da mucho gusto saber que Covey ha sido de su agrado y sobre todo de utilidad. Sus reflexiones enriquecidas con las lecturas de los hábitos de "la victoria privada" nos llevan a razonar y a sentir que la revolución y el cambio provienen y provendrán de "adentro hacia afuera".

Continuamos nuestro camino hacia "la victoria pública" con los siguientes hábitos: Ganar-Ganar, Primero comprender y luego ser comprendido, y Sinergia.
¿Cómo aprenderlos? ¿Cómo interiorizarlos? ¿Cómo practicarlos? ¿Cómo hacerlos comunes?

Muchos saludos y nos vemos pronto

Chary y Enrique

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Estimados Amigos,

Covey menciona que uno de los libros que mayor impacto le ha causado es "El hombre en busca de sentido" de Viktor E. Frankl, en el que el autor describe sus propias experiancias en los campos de concentración durante la segunda guerra mundial, en verdad es impactante. Yo cuento con un ejemplar electrónico por si les interesa. Pueden enviarme sus correos electrónicos a carlosavilabeltran@yahoo.com y con mucho gusto se los hago llegar.

Saludos a todos.

Carlos Ávila Beltrán.

Anónimo dijo...

REFLEXIONES
S. COVEY.

Hace algunos años me presenté para una fuerte negociación en las oficinas de un Presidente Municipal de Coahuila. Mi objetivo era el de negociar el no pago de los derechos de conexión de agua potable y drenaje de un nuevo fraccionamiento de 1,500 viviendas ya que el municipio no me estaba facilitando absolutamente nada de la infraestructura construida, yo contaba con pozo propio y planta de tratamiento de agua negra. En la reunión estuvieron el Presidente Municipal, el Tesorero, el Secretario, el Director del organismo de Agua y el Director de Obras Públicas. De entrada me dijeron que NO era negociable ese pago, por lo que tenía dos alternativas: los demandaba (ya me habían pasado el dato de que una empresa previamente les había ganado un juicio por algo similar, pero ellos no sabían que yo estaba enterado) o buscaba un acuerdo de ganar-ganar, logrando que no se raspara la relación que en definitiva debía durar al menos los siguientes 2 años y medio que les quedaba en el poder. Así que les propuse que yo les cedería a cambio del no pago de los derechos, la posibilidad de cobrar el consumo de agua de todas viviendas, lo que significaría un ingreso municipal sin haber ejercido ningún gasto. La opción dos fue aceptada de inmediato y firmamos un convenio ese mismo día.

Comprender y después ser comprendido. Yo me considero una persona que falla mucho en este aspecto, normalmente estoy pensando lo que voy a contestar antes de escuchar completamente lo que me tiene que decir, y peor aún me resulta cuando hablo por teléfono. Sin buscar pretextos me queda claro que existen muchos distractores que provocan esta falta de comprensión como son: La televisión, el cansancio, el ego (queremos ser escuchados pero no nos interesa saber lo que los demás tiene que decir), etc. Ayer por la noche llegué mentalizado a mi casa en poner en práctica el quinto hábito. Me resultó muy difícil por los factores antes descritos así que apagué la TV y busqué por todos los medios escuchar a mi esposa, ponerle atención, ponerme en su lugar, comprenderla sinceramente y me quedé maravillado del resultado. Nuestro estado de ánimo mejoró mucho y nos fuimos a descansar muy satisfechos de habernos podido comunicar ambos sin suponer lo que el otro diría.

La sinergia es el resultado del trabajo en equipo. Cuando estuve en la Universidad nos pusieron un trabajo final el cual nos llevó 3 días con sus respectivas noches para concluirlo. Este trabajo había que realizarlo en equipo y presentarlo a los sinodales, así que nos juntamos 6 compañeros y resultó un éxito. El equipo estuvo formado por dos mujeres y cuatro hombres. Uno de los miembros del equipo era muy bueno para el diseño, así que propuso varias ideas que fue perfeccionado por la opinión y colaboración del resto, resultando un diseño muy bonito. Otro era muy bueno en las maquetas así que propuso los materiales para la silla diseñada por todos y los demás apoyamos con la fabricación de la misma mejorado algunos detalles, etc. En cada uno de los procesos del trabajo participamos los 6 y el resultado final fue un éxito. Independientemente de que en todo momento hubo cordialidad y respeto, cabe mencionar que en diferentes ocasiones surgieron discusiones pero éstas iban limándose con la ayuda de los demás ya que todos teníamos perfectamente clara la meta que perseguíamos. Finalmente nos fue muy bien en esa materia.

CARLOS SAAVEDRA SADA

Anónimo dijo...

Hábitos 4, 5 y 6.
Pensar en Ganar-Ganar
Es muy interesante como Covey nos va diciendo los pasos para ser una gente altamente efectiva. Al llegar al cuarto hábito que es ganar-ganar yo había imaginado en un principio que siempre era ganar desde un inicio y que nunca debía de perder. Sin embargo al leerlo se me viene a la mente cuando era integrante de un equipo de básquetbol, se suponía formábamos al equipo pero en realidad muchas estábamos en descontento con la actitud de las demás así que comenzamos a no asistir regularmente a los entrenamientos, después de un tiempo el entrenador al ver lo sucedido nos reunió y nos dijo que era necesario ver qué era lo que estaba pasando entonces todas comenzamos a decir nuestras inconformidades por lo que decidimos que era mejor continuar sin molestar a los demás y entonces así algunas perdieron el control que querían tener sobre las demás en ese momento pero a la larga el equipo se vio reforzado por las medidas que tomamos en ese instante.

Procure primero comprender y después ser comprendido.
Es muy común que no pongamos atención a lo que nos dicen cuando según nosotros estamos escuchando a alguien muy cercano a nosotros. Creo que siempre el no saber escuchar es el principal problema que enfrentamos diariamente, pues nunca podemos ser comprendidos como lo queremos. Para mí es muy difícil el comunicarme con mi hermana porque aparte de que tiene un carácter muy especial siempre está a la defensiva y entonces el ambiente no se presta para entablar una buena comunicación, pero con el tiempo he podido entender que primero debo de ver que es lo que me está tratando de decir, para que no pueda juzgar antes de que termine lo que ha empezado. Por que la mayoría de las veces es muy común que queremos ser comprendidos pero juzgar a las personas y con eso no vamos a poder lograr nada pues la vida se trata de saber llevar la vida con armonía con los demás, dentro de esa armonía es saber comunicarnos con los demás y sobre todo comprenderlos para que se lleve a cabo bien esa comunicación.

La sinergia
Cuando podamos ser capaces de controlar todos los hábitos que nos habla este libro vamos a poder ser capaces de tener sinergia en nuestra vida porque primero debemos de ganar la victoria interna y luego la externa para que la sinergia sea buena. Retomando el ejemplo del equipo de básquetbol en el mismo caso, podemos decir que desupés de todo generamos sinergia en el equipo porque pudimos superar la dificultad que tenemos y además de que nos necesitabamos una de la otra para que fuera en realidad un equipo, ya que cada una tenemos capacidades diferentes que sirven para que el equipo sea mejor, entonces fue como logramos más victorias y sobre todo que el equipo se uniera en todos las actividades que se realizaran.

Marilú Saray Soliz Ortiz

Anónimo dijo...

Antes de comenzar con mi reflexión quiero compartirles una frase que me llamó mucho la atención que viene en la parte de paradigmas de interdependencia, previo al hábito 4, y cito: “no puede huir de problemas en los que se ha metido usted mismo”; esta frase me llamó la atención porque en lo personal muchas veces me he llegado a quejar de que tengo o estoy en algunos problemas y en la mayoría de esas veces pienso que la causa de mis problemas son externas a mí.
Ya entrando en materia, me resultó interesante como Covey comenta que no siempre el pensar ganar/ganar es la mejor opción, sino que depende de la situación, pues yo creía que siempre había que buscar el ganar/ganar, esto a raíz de cuanto por primera vez fui a solicitar un patrocinio para un evento que íbamos a realizar en el Campus, en esa ocasión me fue muy difícil conseguir patrocinios pues mi actitud era de ganar/perder, pues buscaba un beneficio para mí(el evento) y no analizaba que podría ganar ese patrocinador potencial al proporcionarme ese apoyo. Después de un curso al que asistí en Monterrey de Coaching y Patrocinios, aprendí que antes de ir a solicitar un apoyo con cualquier patrocinador, era necesario analizar bien qué buscaba obtener de ese patrocinador y si realmente el patrocinador que tenía en mente me lo podía proporcionar; al mismo tiempo tenía que pensar en que podía ofrecerle a ese patrocinador para que percibiera el patrocinio como un intercambio (ganar/ganar) y no como un apoyo o asistencia de su parte (ganar/perder). Por otro lado, en mi poca experiencia, he visto que las formas de pensar más comunes en mi entorno son el ganar/perder o el perder/ganar y en menor proporción la de ganar/ganar, la de perder/perder no la he visto o tal vez no la he sabido identificar.
En este mismo contexto, en un inicio y con regularidad se presentaban conflictos entre los integrantes del equipo que organizábamos los eventos, pues todos exigían y desde su trinchera consideraban que las actividades o roles de los demás eran más sencillas de realizar o tenían menor importancia para alcanzar la meta (el evento), con el paso del tiempo y las retroalimentaciones que generamos nos dimos cuenta de que cada quien hacía bien las actividades que le tocaban pero no consideraban a las de los demás (buscábamos primero ser comprendidos y luego comprender), lo que ocasionaba los conflictos. Gracias a estas retroalimentaciones logramos identificar lo que a nuestro parecer era la causa de los conflictos y precisamente era que no nos poníamos en los zapatos de los demás para entender el porqué cada quien hacía las cosas como las hacía, una vez identificada la causa, nos dimos a la tarea de antes de reclamar o exigir algo, teníamos que comprender la magnitud e importancia de las actividades que los demás realizaban (primero comprender, luego ser comprendido). Una analogía al primero comprender y luego ser comprendido que encuentro interesante es la que dice que es primero escuchar y luego a ser escuchado.
Por último, en mi campus hay un grupo estudiantil que se llama sinergia, cuando supe de ese grupo estudiantil fue la primera vez que escuche la palabra sinergia y me causo mucha curiosidad su significado, por lo que fui a hablar con la persona creadora de ese grupo y quien le puso ese nombre para que me dijera porqué el nombre y qué significaba, a lo que esa persona contestó escribiendo en un papel algo que me llamó la atención: “1+1=3” expresión que después complementó con la frase: “o más”, posteriormente me explicó que es más el todo que la suma de sus partes, frase que también utiliza Covey para definir la sinergia en este libro, en un principio no entendí del todo a que se refería y la expresión que me había escrito me pareció absurda, a los pocos meses comencé a entender la riqueza tanto de la expresión como de la definición, mientras formaba mi planilla para contender por la Sociedad de Alumnos de mi carrera.

Gabriel Yahbi García Bravo

Anónimo dijo...

Ensayo de los capítulos 4 al 6 del libro “Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva”
Cuarto Hábito “Ganar/Ganar”
Al conocer éste hábito me sentí muy identificado con dos de los paradigmas que se presentan, ya que en el trabajo cada día nos enfrentamos a situaciones en las que nos vemos obligados a exigir o que se nos exija algo.
La filosofía de ganar/ganar me parece muy efectiva ya que los beneficios son mutuos y a largo plazo no se pierde en ninguna de las partes.
Me parece importante comentar sobre algunos de los paradigmas de la interacción humana; como el de gano/pierdes ya que éste puede ser inculcado desde la niñez y tal vez no sea con mala intención pero como está relacionado con las comparaciones para otorgar paciencia, comprensión y amor, nos hace sentir que no somos dignos de merecer intrínsecamente este tipo de sentimientos a menos que nos lo ganemos siendo mejor que nuestros iguales; “si soy mejor que mi hermano, mis padres me querrán mas”.
El autor menciona que vivimos en una sociedad en la que el valor de un individuo se obtiene por la comparación con otros y no se otorga ningún reconocimiento al valor intrínseco, por lo que pienso que esa es una de las razones por las que usamos éste paradigma.
El paradigma pierdo/ganas es en mi opinión más dañino ya que uno se subordina a las circunstancias y debilidades de los demás. Por ejemplo, en una discusión se prefiere ceder o renunciar y eso hace que las personas encierren muchos sentimientos negativos que pueden tener consecuencias inclusive en la salud física. Este paradigma denota falta de dirección interna y sentimientos de desdicha que causa el sentimiento de conformidad y aceptación de que el perder tal vez no sea tan malo.
Por último, el paradigma de ganar significa que no importa si la otra parte gane o pierda, siempre y cuando se obtenga lo que se desea. Tal vez este paradigma sea el menos dañino de los dos anteriores por qué no implica daño para ninguna de las partes, pero pienso que buscar la filosofía de ganar/ganar nos puede acercar más al liderazgo que buscamos y permite un desarrollo personal y profesional mas íntegro.
Quinto Hábito “Procure primero comprender y después ser comprendido”
La comunicación que se nos presenta en este hábito me ha hecho comprender que no solo es necesario saber expresarse, sino que saber escuchar es tal vez más importante, y como dice el autor hay que ponerse en el lugar de los demás y saber si realmente somos capaces de comprender lo que se nos quiere decir, en vez de solo preparar una respuesta. Un amigo me dijo una vez, que todo mundo puede de solucionar la vida de los demás en cinco minutos, pero nadie es capaz de resolver sus propios problemas, y creo que hay algo de cierto en ese pensamiento.
Además de saber escuchar las palabras, siempre me ha parecido muy interesante el saber cómo interpretar la manera de expresarse de las personas y confirmo mi teoría con lo que se menciona en el libro respecto al porcentaje de importancia en la comunicación, ya que si del mensaje que alguien transmite, las palabras solo representan el 10%, pues en lo personal me encantaría saber de un buen libro sobre expresión no verbal y de esa manera poder mejorar significativamente mi nivel de comunicación, y lograr como dice el autor, una comunicación empática.
Quinto Hábito “La sinergia”
Este hábito es para mí como una combinación de los anteriores, y la sensación de trabajar o realizar cualquier actividad con sinergia nos permite dejar salir nuestro potencial y creatividad; y aunque no he leído el séptimo hábito, me parece que la parte más substancial del libro ya la he conocido y pienso que éste tipo de lecturas no son para conocerse una sola vez, sino mas bien, las cosas que aquí se aprenden es fácil olvidarlas con las presiones y compromisos diarios, por lo que en lo personal tendré este libro cerca para recordar que siempre podemos detenernos un poco y ver hacia dónde vamos y como lo estamos haciendo.
ESTEBAN SERVANDO PERALTA ROMERO
A01301871

Anónimo dijo...

Reflexión: Covey hábitos 4, 5 y 6.

Es bien complicado encontrar personas que realmente busquen un beneficio mutuo en cualquier circunstancia; ya no digamos en los negocios: en un percance automovilístico, en el pago de impuestos, en la compra de bienes, etc. Esa relación ganar – ganar que se expone en el hábito 4, me hace pensar en algo en lo que deberíamos pensar en cada momento: ¿qué es lo correcto, qué es lo que se debe (y no lo que se puede) hacer en cada circunstancia de la vida? Partiendo de esta premisa, considero que puedo lograr relaciones en las que ambas partes podamos salir beneficiadas. Porque también es muy común encontrar personas que son muy simpáticas, “muy buena onda” como se dice comúnmente, pero que lo único que quieren es fastidiarnos o sacar algún beneficio de nosotros (¿recuerdan la campaña de tele: cuéntaselo a quien más confianza le tengas?... es algo así).

Creo que, además de intentar buscar relaciones ganar – ganar, debemos intentar detectar aquellas situaciones o personas que únicamente busquen ganar y que nosotros perdamos, eso es algo fundamental. Entonces, ello nos llevaría a poner en práctica el hábito 5 de una manera sencilla y práctica. Es decir, si aplicamos aquello de “permíteme escucharte primero”, estaremos dándonos la oportunidad de “ensayar”, por llamarlo de alguna manera, lo aprendido en el libro de Covey, hasta que logremos dominarlo. En mi caso, el tipo de ensayos para aprender a decir “no” o para ser duro o exigente, lo llevo a cabo con personas que no conozco y que probablemente nunca voy a volver a ver… un mesero en un restaurante, por ejemplo, que espera una gran propina por un mal servicio y con toda la energía le dices que no se la ha ganado. Posiblemente se moleste, pero también posiblemente nunca lo vuelvas a ver. Es únicamente una analogía, una sugerencia de cómo poner en práctica el hábito 5.

Estoy seguro que el entrenamiento en esta especie de “técnica”, nos hará cada vez más creativos. Nos hará “sinergizar” con las demás personas, o dicho de otro modo, nos hará aplicar el hábito 6, en donde nos explica Covey, entre otras cosas, que 1 + 1 es igual a 3, 4 o 5. En mi caso, creo que es de suma importancia hablar mucho para llegar a una excelente comprensión con la otra parte, porque yo no soy de los que sabe escuchar.

Por último, quiero comentar que es muy común en mi trabajo ver personas que no son consistentes con los objetivos que se plantean. A diario me encuentro con planes a medias, decisiones no tomadas o a destiempo. Tratemos de ser consistentes con nuestras acciones y con nuestras decisiones para poder ser más sinérgicos y establecer relaciones ganar – ganar que nos permiten alcanzar el éxito en todos los sentidos de nuestras vidas: social, laboral, espiritual y sobre todo, familiar.

Saludos a todos.

Carlos Ávila Beltrán.

Anónimo dijo...

Ganar – Ganar

Me parece muy interesante el enfoque de pensamiento Ganar- Ganar, donde el único objetivo que se persigue es el beneficio mutuo, sin embargo, me parece muy triste que aún gran parte de habitantes de mi país aún no incorporan dicho pensamiento en su actuar diario, al contrario, entre más negocios, tratos, trabajos, etc., se pueda realizar obteniendo la mayor de las ventajas a costa del otro, y sin corresponder en la misma medida, se ve como “mejor”.

Y se me viene a la mente un ejemplo muy claro, las personas que compran café, chiles, granos, todo tipo de verduras o flores, a muy bajo precio a los campesinos , para después venderlos a un precio muy elevado, me parece totalmente injusto, pues los primeros trabajaron la tierra arduamente, y los segundos sólo se enriquecen a costa de dicho trabajo, se ve claramente un pensamiento de ganar- perder.

Escuchar

Hoy en día la gente tiene tantas ocupaciones que parecería casi imposible escuchar, realmente escuchar a otra persona, con tanta prisa, tráfico, reportes de emergencia, etc, etc, creo que una buena salida sería tomarse 15 minutos al día para primero escucharse uno mismo (a su voz interior), para poder así escuchar al prójimo.

Creo definitivamente que no tenemos una cultura del “buen escuchar”, pues sin duda alguna creemos que dicho término se refiere a tratar de solucionar las situaciones o conflictos que se nos comparten, repetir las mismas palabras, o inclusive hasta cambiar el tema. Me gustaría compartir que, en lo personal, soy muy mala en escuchar a los demás, tristemente, a veces pienso que los demás no tienen cosas tan importantes que comentar como las mías, y confieso que muchas veces veo fijamente a la persona mientras me platica, pero mi mente divaga o comienza a planear lo que haré al día siguiente. Pero hoy me he dado cuenta de que escuchar es realmente un arte y que es sumamente importante, por lo cual comenzaré a practicarlo de una mejor manera, para mejorarlo.

Sinergia

Me pareció realmente sorprendente la explicación sobre porque las aves vuelan en V, cosa de la que siempre había tenido curiosidad, y ahora que me he dado cuenta del porqué, realmente eme pone a meditar y preguntarme cómo es que las aves sin recibir educación alguna, han logrado comunicarse de tal manera que entre ellas se apoyan y realmente colaboran como un equipo para lograr un beneficio grupal, y los seres humanos a pesar de contar un un lenguaje hablado, tristemente no hemos logrado llegar a acuerdos o consensos y una muestra clara de ello podían ser los largos e inútiles debates en la cámara de diputados, los plantones y marchas en las avenidas, sólo por nombrar algunos.

Ethel :)

Anónimo dijo...

Hábitos 4, 5 y 6

Pensar en ganar-ganar de inicio es complicado y más proviniendo de una cultura como la nuestra en donde cualquiera quiere sacar ganancia de todo, no importando qué pase con la otra persona. Pero haciendo el ejercicio es muy reconfortante el recibir un agradecimiento y un fuerte apretón de mano por llegar a una negociación justa y que lleve ganancias a ambas partes.
Soy responsable de una área de servicio al cliente y mis principales clientes son internos de la compañía (es el área de ventas) y eran bastante quisquillosos hasta que nos sentamos a establecer parámetros para medirnos incluyendo servicios que ellos nos tienen que proveer, e incluimos frecuencias de revisión de cada uno así como un calendario de visitas para captar requerimientos adicionales y desde esa fecha hemos establecido una relación mucho más abierta y de confianza.
Aplicando el hábito 5 y 6 con esta misma experiencia, nos ha permitido realizar proyectos que para la compañía han representado ahorros importantes y se han reflejado en la contribución marginal que obtienen con la venta de los productos. El habernos sentado a escuchar sus requerimientos con todos los detalles que consideraban importantes y que ellos entendieran todos nuestros requerimientos permitió el ejecutar los proyectos de manera más fácil y de manera coordinada.
Como comenta Covey, la práctica y conciencia de adoptar los hábitos de la forma conciente a la inconciente nos ayudará a ser mejores personas y por ende mejor miembro del grupo que sea (familia, trabajo, sociedad, etc)

Víctor Hugo Jácome Ibarra

Anónimo dijo...

Reflexión hábitos 4 al 6

Jesús Vivanco.

Me llama la atención el hecho de que Covey indica que la mejor opción de las cinco filosofías dependerá del contexto vigente, de la realidad, como él le llama. Es decir uno debe tener la capacidad para interpretar la realidad, pero al considerar a la realidad como sistema entonces la única alternativa viable es pensar ganar – ganar. Muchas veces no estamos muy concientes de la interdependencia que existe entre nosotros y nuestro contexto, llámense personas o medio ambiente, esto genera que actuemos de manera equivocada, creo que mas por ignorancia o desinterés que por mala voluntad. Esto se ve claramente en el hecho de que todos contaminamos de una forma u otra, en mayor o menor grado, aún cuando me atrevo a decir, toda persona sabe que la contaminación es dañina. Tenemos una relación perder – perder con nuestro planeta tierra, y es fácil constatarlo al observar el constante deterioro ambiental de nuestros ecosistemas y los procesos acelerados de desaparición de especies, todo ello enarbolando la bandera de la industrialización y el progreso de los pueblos. En el corto plazo pudiese parecer que unas naciones están ganando, cuando en realidad todos de alguna manera estamos perdiendo. El problema ambiental no se solucionará hasta que, primeramente los individuos y posteriormente los países estén totalmente concientes de las interrelaciones que existen entre las naciones y el planeta, solamente a partir de ahí podrán empezarse a tejer relaciones ganar – ganar. Cambiar el paradigma no será fácil. Ganar – ganar es una filosofía que deberá superar serios retos, uno de los más importantes es la propia teoría económica, que sitúa al hombre como un ser de necesidades insaciables y a su entorno como un sistema donde los recursos siempre son escasos y no alcanzan para todos. Los libros de economía contradicen la filosofía de Covey.
Finalmente, considero que un requisito para tejer una relación ganar – ganar y crear sinergias es precisamente saber escuchar a los demás, y esto se aplica en todos los niveles: desde los individuos hasta los países, pasando por las empresas. Pero saber escuchar implica actuar de buena fe y abrirse sinceramente, lo cual no es fácil porque en general eso no se hace con nadie a menos que se le tenga confianza. Hace unos meses estuve en una conferencia donde el ponente dijo “Como empresa nosotros tratamos de actuar lo mejor que podemos, pero al hacer negocios con gente de una cultura diferente a la tuya, que no comparte tus ideales, resulta imposible actuar pensando en el bien común…los chinos en todo momento tratan de estrangular al máximo nuestras ganancias, en ese sentido necesariamente tenemos que responder” Desafortunadamente vivimos en una época de desconfianza donde no hay ideales compartidos, esto me lleva nuevamente a la conclusión de que es necesario que los individuos cuenten con un encuadre de valores universales aceptado por las distintas culturas, creo que esa es la parte por la que debemos empezar.

Saludos.

Erick dijo...

Estos hábitos me parecen muy importantes ya que me ayudan a comprender la forma en la que me comunico y las demás personas se comunican conmigo. Me di cuenta que soy alguien a quien le gusta ser escuchado, le gusta dar sus puntos de vista porque pienso que son importantes. Pero en ocasiones soy impaciente y saco mi conclusión antes de escuchar y comprender realmente lo que la otra persona quiere expresarme, no practicaba el hábito: Permíteme escucharte primero!!!
Ahora reconozco que todos deseamos ser escuchados y aunque lo que digan no se ajuste a mi forma en la que veo las cosas debo ser de mente mas abierta entender que todos tenemos opiniones quizás muy distintas pero igualmente valiosas y que para liderar mi vida y la de las demás personas debo aprender a escucharlas a aceptar sus opiniones, sus punto de vista porque con esto generare confianza respeto, aceptación y estén dispuestas a hablar conmigo. Además algo que me llamo la atención fue que algunas personas poseen formas de expresarse muy diferentes, acostumbran a callar, así es como se comunican y cuando dicen algo realmente sienten lo contrario, gritan internamente para que los entendamos, poder reconocerlas, ahí es donde esta el verdadero reto.
En mi vida personal fue uno de los factores quizás mas complicados al inicio de la relación matrimonial ya que estábamos acostumbrados a hablar y no a escuchar, pero con el paso del tiempo sin darnos cuenta aprendimos a escucharnos y algo que quizás parecerá extraño fue que inclusive sabíamos que algunas veces debíamos ceder y el ganar-ganar era aplicado momentos después cuando se volvían a retomar los diálogos y ambos salíamos ganadores. También vale la pena comentar que influían factores como el trabajo, la universidad, las responsabilidades que alteraban nuestros sentido del dialogo.