Sus comentarios han empezado a fluir y algunos de ellos reflejan su propia iniciativa por incidir en sus decisiones, su capacidad de elección; por ende su proactividad. La elección de seguir una Maestría y su propio camino hacia la independencia y más tarde la interdependencia.
En estos segundos comentarios el camino comienza a apoyarse en las relaciones con "mis otros Yo". Somos uno con diferentes rostros, somos muchos con un mismo camino.
Buenos comentarios y a disfrutar la lectura.
Una magnífica semana
Enrique
En estos segundos comentarios el camino comienza a apoyarse en las relaciones con "mis otros Yo". Somos uno con diferentes rostros, somos muchos con un mismo camino.
Buenos comentarios y a disfrutar la lectura.
Una magnífica semana
Enrique
16 comentarios:
Siempre he considerado el cultivo de las relaciones personales como una de las claved el éxito, especialmente a nivel laboral.
Algo que cambió mi manera de pensar en como mejorar mis relaciones laborales fueron los ejemplos de sinergias negativas. Cuando se menciona específicamente la comunicación defensiva. El ir y venir de oficios, notas y llamadas que nada aportan a una relación entre dos oficinas y solo se hace por costumbre o por defensa. Pondré especial atención en esto ahora y trataré de cambiarlo.
Otra de las cosas que llamaron mi atención, fue pensar en el concepto de plenitud, para de ahí aceptar todas las opiniones y no sentirse amenazado por nadie. Cuando uno está bien consigo mismo, puede absorber mejor las oportunidades que le presenta la convivencia con los demás.
Por último, me gustaría convencer a mis colegas, en lugar de ordenarles las cosas. Entiendo que toma tiempo, pero mientras definas tareas concretas, cosas que no hacer y objetivos claros, puedes hacer que otros trabajen el doble por un proyecto, ya que saben que tiene el juez más estricto, ellos mismos.
Manuel S. López Kneeland
Este segundo bloque de hábitos, me ha permitido encontrar pros y contras de la actividad que realizo día a día. Siempre he sido un convencido del concepto ganar/ganar, así, todos juntos y en equipo, yo solo represento (como fue el ejemplo en clase) el iceberg, pero debajo de mi existe un formidable equipo que aporta, soporta, enriquece y apoya decisiones. En la administración publica y en la vida se encuentran diferentes personas que materializan los otros paradigmas, e incluso, seguramente en algún momento yo he caído en pretender gano/pierdes, el mejor remedio para eso es claridad en la ideas y un sentido importante de pertenencia al equipo en el que se trabaja.
Dentro de las enseñanzas de estas "Victorias Publicas" es la de comprender y después ser comprendido, yo he tenido siempre muy presente aquella sabia frase de Voltaire, que mencionaba "No estoy de acuerdo con lo que dices, pero daría mi vida por defender el derecho que tienes a decirlo", constantemente en mi oficina nos sentamos a presentar proyectos y estos pueden ser enriquecidos o modificados desde diferentes y en ocasiones encontrados puntos de vista, siempre en el ánimo de la mejora.
Un principio fundamental de las democracias y de las culturas organizacionales es que las partes también forman el todo y viceversa, el todo es la suma de las partes, apoyados en este precepto podemos ver que el desarrollo no solo de nuestra actividad laboral diaria sino de nuestras vidas tiene que tener sinergias con quienes nos rodean, de esta manera los diferentes puntos de vista pueden ser incorporados a nuestro actuar diario.
En conclusión, siento que la revisión de estos segundos 3 hábitos de victoria pública me han permitido encontrar las áreas de oportunidad y de mejora, así como recordar conceptos tan importantes que se habían quedado guardados en algún baúl y necesitan ser utilizados nuevamente, marca como dicen en Estados Unidos "back to basics"
Ganar – ganar me ha significado la posibilidad de lograr objetivos y resultados deseados con base a generar el interés y compromiso de los demás para que en conjunto, lleguemos a la meta prevista y obtener los resultados deseados.
La mejor manera de hacerlo es trabajar juntos desde un inicio, de común acuerdo, conociendo las aptitudes y debilidades del personal para poder ayudarlos y fomentar sus potencialidades e intercediendo en reducir sus debilidades. Es importante también conocer las condiciones bajo las cuáles se desempeña el personal a cargo para considerarlas dentro de su desempeño. No se puede exigir cuando hay las condiciones para lograrlo.
Por otro lado, para lograr resultados eficientes, es fundamental indicar claramente el camino a seguir para no perder tiempos ni esfuerzos. Es importante ofrecerles estrategias y nuevas alternativas para concretar las tareas, así como otorgarles los recursos disponibles para llevar a cabo las acciones que se les encomiendan.
En mi concepto, ganar – ganar incluye acciones de capacitación que fomenten las habilidades, actitudes y prácticas, lo cual es de gran valía para cualquier equipo de trabajo y el propio, con mayor razón.
Con relación al quinto hábito, “Procure primero comprender y después ser comprendido”, he de confesar que es un hábito débil en mi actuar como dirigente de un equipo de trabajo. La escucha efectiva tal como se define, no la practico rutinariamente, ya que la costumbre es escuchar para contestar y no para comprender lo que envuelve una conversación, considerando que la comunicación incluye además de la conversación, el lenguaje corporal y los sonidos emitidos, por lo que normalmente mi comunicación con otras personas del equipo de trabajo queda en el nivel de la escucha selectiva, sin pasar a los dos niveles siguientes.
La relación de trabajo en la oficina, está cargada de sentido técnico y solo en contadas ocasiones se mezclan aspectos personales o psicológicos, por lo que la comunicación superficial se hace cotidiana con la mayor parte de las personas con las que se interactúa diariamente, y solo son contadas las personas en el ambiente de trabajo con las que se puede trascender al nivel de escucha atenta y empática. El fomentar y fortalecer la escucha empática es una tarea pendiente en mi desempeño personal y profesional y a la cual debo poner la atención necesaria para hacer de este hábito una buena herramienta personal y de trabajo, ya que además, constituye un pilar del desarrollo personal.
La sinergia tocando el sexto hábito, es una práctica que he integrado permanentemente en mis esquemas de trabajo, siendo la que me ha dado los mejores resultados cuando se trata de demostrar un trabajo sistemático que incorpore los recursos disponibles en el ambiente de trabajo, iniciando con demostrar que mis actitudes son coherentes con las expresiones y no solamente el deseo de hacer bien las cosas. Es importante dar a las personas que interactúan conmigo, la certidumbre de que mis hechos son acordes con mi actuar y mis palabras, con lo cual obtengo la confianza para acercarme a las personas y ganar su respeto. El tener claro el panorama a corto y mediano plazo, como lo expresé inicialmente, es un as bajo la manga, que me ha permitido cohesionar a los equipos que he tenido la oportunidad de dirigir y obtener su sinceridad que a la postre, significa la diferencia entre lograr resultados y quedarse a medio camino.
José Rubén R. Alcántara Díaz:
Ganar – ganar me ha significado la posibilidad de lograr objetivos y resultados deseados con base a generar el interés y compromiso de los demás para que en conjunto, lleguemos a la meta prevista y obtener los resultados deseados.
La mejor manera de hacerlo es trabajar juntos desde un inicio, de común acuerdo, conociendo las aptitudes y debilidades del personal para poder ayudarlos y fomentar sus potencialidades e intercediendo en reducir sus debilidades. Es importante también conocer las condiciones bajo las cuáles se desempeña el personal a cargo para considerarlas dentro de su desempeño. No se puede exigir cuando hay las condiciones para lograrlo.
Por otro lado, para lograr resultados eficientes, es fundamental indicar claramente el camino a seguir para no perder tiempos ni esfuerzos. Es importante ofrecerles estrategias y nuevas alternativas para concretar las tareas, así como otorgarles los recursos disponibles para llevar a cabo las acciones que se les encomiendan.
En mi concepto, ganar – ganar incluye acciones de capacitación que fomenten las habilidades, actitudes y prácticas, lo cual es de gran valía para cualquier equipo de trabajo y el propio, con mayor razón.
Con relación al quinto hábito, “Procure primero comprender y después ser comprendido”, he de confesar que es un hábito débil en mi actuar como dirigente de un equipo de trabajo. La escucha efectiva tal como se define, no la practico rutinariamente, ya que la costumbre es escuchar para contestar y no para comprender lo que envuelve una conversación, considerando que la comunicación incluye además de la conversación, el lenguaje corporal y los sonidos emitidos, por lo que normalmente mi comunicación con otras personas del equipo de trabajo queda en el nivel de la escucha selectiva, sin pasar a los dos niveles siguientes.
La relación de trabajo en la oficina, está cargada de sentido técnico y solo en contadas ocasiones se mezclan aspectos personales o psicológicos, por lo que la comunicación superficial se hace cotidiana con la mayor parte de las personas con las que se interactúa diariamente, y solo son contadas las personas en el ambiente de trabajo con las que se puede trascender al nivel de escucha atenta y empática. El fomentar y fortalecer la escucha empática es una tarea pendiente en mi desempeño personal y profesional y a la cual debo poner la atención necesaria para hacer de este hábito una buena herramienta personal y de trabajo, ya que además, constituye un pilar del desarrollo personal.
La sinergia tocando el sexto hábito, es una práctica que he integrado permanentemente en mis esquemas de trabajo, siendo la que me ha dado los mejores resultados cuando se trata de demostrar un trabajo sistemático que incorpore los recursos disponibles en el ambiente de trabajo, iniciando con demostrar que mis actitudes son coherentes con las expresiones y no solamente el deseo de hacer bien las cosas. Es importante dar a las personas que interactúan conmigo, la certidumbre de que mis hechos son acordes con mi actuar y mis palabras, con lo cual obtengo la confianza para acercarme a las personas y ganar su respeto. El tener claro el panorama a corto y mediano plazo, como lo expresé inicialmente, es un as bajo la manga, que me ha permitido cohesionar a los equipos que he tenido la oportunidad de dirigir y obtener su sinceridad que a la postre, significa la diferencia entre lograr resultados y quedarse a medio camino.
EDGAR VARGAS
Creo que uno de los aspectos fundamentales en la utilización y aplicación de los siete hábitos de Covey recaen en la ser una persona de transición, creo que cada uno de nosotros desde su individualidad y desde su entorno en el que se desarrolla adquiere información que de alguna manera le dotan de herramientas para la construcción y dirección de sus acciones. Darwin, demostró que el proceso de selección natural era el mecanismo principal de cambio en los seres vivos, también decía que la reproducción no es una forma perfecta de replica, existe la variación, y con ella la diversidad se convierte en el potencial para evolucionar, Darwin apareció con la idea de que un rasgo persistiría a lo largo de muchas generaciones solamente si confería una ventaja evolutiva, y se afirma también que la selección natural implica competición, de todos contra todos y del que gana se lo lleva todo. Creo que el hombre esta en esa constante evolución y que muchos creemos estar en esa competencia sin tener identificadas y controladas nuestras metas y habilidades que nos permitan enfrentar esa diversidad con mayores posibilidades. Estamos ante una fuente constante de conocimientos y experiencias que fortalecen los potenciales de cada individuo, en unos más que en otros, no basta con saber el camino que te puede llevar a una supervivencia lo verdaderamente importante desde mi punto de vista, reside en la adopción y ejecución constante de aquellos hábitos que permitan al individuo la satisfacción de sus necesidades materiales, espirituales y sociales, así como de su integración a su entorno social y productivo.
Covey, me pone al descubierto muchas de ventanas que no alcanzaba a entender, del orden que debo imprimirle a necesidades y de la importancia que tiene utilizar las habilidades, descubiertas o adquiridas, en la integración y colaboración para el logro de objetivos tanto personal, familiar y social. En mi experiencia, considero pertinente incorporar los siete hábitos en mi proceso de desarrollo, considero a la comunicación, los valores como los ejes que permitirán afilar la sierra.
Víctor Manuel Ayala Campos…
Hábito 4
Continuando con el ejemplo plasmado en mi primer comentario y tomando como referencia este hábito; podría decir, que para que los demás se contagiaran del objetivo que perseguía o que traía en mente, tendría que convencerlos de que de llevarlo a cabo o realizarlo, sería en beneficio de todos, de esta manera ellos se sentirían satisfechos con el resultado, es decir que ellos ganarían y yo ganaría, con el resultado obtenido.
Hábito 5
Este hábito en particular, me ha hecho recapacitar en gran medida, ya que a veces no sabemos escuchar, no tratamos de entender lo que los demás tratan de decirnos, de comprender realmente que es lo que sienten, lo que piensan, etc… y solo registramos las palabras que nos dicen, sin analizar e ir más allá de lo que realmente quieren expresarnos; realmente me ha dejado una gran lección, ahora sé que una persona que escucha es y será mayormente enriquecida en todos los aspectos y esto hará que fácilmente sea comprendido, toda vez que logra una comunicación y empatía con los demás más fluida y efectiva.
Hábito 6
Ahora bien, para poner en práctica estos preceptos se requiere aplicarlos, llevarlos a la vida real en conjunto con los demás, es interactuar, aportar, participar etc.; tomando nuevamente el ejemplo plateado por un servidor, se puede concluir que este hábito constituye la plataforma para poner en práctica todos los demás hábitos, es decir: que una vez siendo proactivo, teniendo bien claro el objetivo a perseguir, convenciendo a los demás del beneficio mutuo, empatando las ideas, pensamientos y sentimiento de los demás, lo único que resta es ponerlo a prueba aprovechando las energías, entusiasmo, disposición y sobretodo el convencimiento de los demás para llegar al éxito.
Al pertenecer a una nueva organización laboral que comienza a interrelacionarse, se inicia la identificación de fortalezas y debilidades, en este análisis se identificaron deficiencias que permitirán poner en práctica los hábitos estudiados. Quisiera comenzar diciendo que para poder hacer partícipe a un equipo de trabajo, a un grupo de personas, a una empresa o a una organización debieran contar primero con un liderazgo sano, que involucra los tres primeros hábitos personales.
Lo anterior, permite desarrollar los siguientes tres: ganar/ganar, primero comprender y después ser comprendido y la sinergia, y lo menciono porque de manera institucional lo descubrí al hacer el diagnóstico situacional de la coordinación en donde existen muchas oportunidades de mejora. Observé que sólo se permitía participar a un reducido número de colaboradores que no se consideraba y mucho menos escuchaba, esto no permitía generar confianza, integración, participación y es obvio que no existía la aptitud y actitud de todos por la separación de intereses y en el ambiente merodeaba el gano/pierdes.
Después de llevar a cabo el diagnóstico que duró en promedio mes y medio comenzamos por priorizar y le dimos la importancia en primer lugar al recurso humano quienes en principio se sintieron sorprendidos ante una inusitada forma de trabajo, hoy distinta; que comenzara por recobrar la confianza de ellos, dignificando cada una de sus acciones en su área de competencia, reconociéndoles la importancia que en una organización involucra la cohesión desde el titular con sus otras áreas de trabajo.
Día a día identificamos y reconocemos que hay áreas que debemos de fortalecer dado que son muy débiles, de manera personal la escucha empática debiera de ser una de las que más refuerce.
No son aislados estos hábitos y todos se interrelacionan pues tienes que hacer participar al grupo, entenderlo, acrecentar su confianza (cuanta bancaria emocional) generar esa sinergia con comprensión y respeto que genere un pensamiento fresco (“positivo y fluido”) y al final la integración como equipo donde la filosofía no sea otra que la de ganar/ganar .
Enrique López Leyva
Para adaptarnos al mundo, a los diversos cambios que se generan dentro de las organizaciones, debemos enfocarnos en la utilización de prácticas positivas que generen movimientos positivos.
La mentalidad ganadora debiera ser la que prevalezca en las organizaciones pero no solo ganadora en sí, sino con un enfoque ganar/ganar donde el beneficio mutuo o beneficio general sea el primordial, en nuestra organización desafortunadamente se vuelve complicada la utilización de prácticas que permitan movimientos positivos, la gente es reacia al cambio, a la mejora, debido a su “estabilidad laboral”, sin embargo se han ido implementando prácticas y estrategias que busquen dicha mejora, por lo que el trabajo en equipo es fundamental para lograr una verdadera victoria, involucrando al personal a los diferentes proyectos emprendidos en nuestra organización se busca que a través de capacitación y reconocimiento, se motiven para lograr las metas proyectadas y en sí el éxito personal y en conjunto.
La comunicación efectiva, es decir la escucha y la compresión es la base de la meta organizacional, en este caso se procura la confianza del personal, el acercamiento a cada uno de ellos, para descubrir a fondo cual es su necesidad real , esto involucra necesidades laborales y personales. Fomentando la comunicación y participación conjunta, la sinergia del equipo se refleja en los resultados generales, en lo que cada uno da de si mimo y que al final el esfuerzo permita lograr cambios positivos en toda la organización. El capital humano sigue siendo la base de la renovación.
Sylvia Astrid Rosas Negrete
HABITO 4 - GANAR/GANAR
Dentro de mi ámbito de trabajo, es muy importante trabajar en equipo, en donde todos seamos beneficiados, es decir, cada una de las áreas debe de caminar en conjunto para que al final los resultados sean los esperados por todos, construcciones óptimas y adecuadas para la sociedad.
Con la finalidad de aplicar nuevas técnicas para el desarrollo de actividades, la comunicación entre el personal es de suma importancia, ya que de esta forma se consideran distintos puntos de vista que permitirán mejorar las condiciones laborables, mismas que se verán reflejadas en resultados esperados.
HÁBITO 5 -PRIMERO ENTENDER LUEGO SER ENTENDIDO
Al ser la comunicación el factor más importante dentro del ámbito de desarrollo de actividades, se establecen mesas de trabajo periódicamente que me permitan debatir las mejores propuestas para el desahogo de conflictos, así como las que permitan lograr el objetivo deseado.
Escuchar siempre con empatía a la gente que labora conmigo es una herramienta importante, ya que me proporciona información precisa con la cual trabajar, en razón a que de esta forma me permitirá tomar la mejor decisión y así evitar cometer errores.
HÁBITO 6 - SINERGIZAR
En este hábito vuelvo a recalcar que el trabajo en equipo es de suma importancia, en razón a que la la comunicación y el trabajo en equipo nos hace cometer el mínimo de errores, lo anterior, se hemos logrado con la comunicación en las distintas áreas, tomando en cuenta los puntos de vista de quien desarrolla la actividad, y de esta forma, el líder tomas las mejores decisiones en beneficio de todos.
En mi experiencia como líder, he observado que los éxitos obtenidos, se han logrado en los cuando se trabaja consigue formar un equipo, que trabaja por los mismos objetivos y por encima de temas personales.
Saludos
Lic. Homero Navarrete
COMENTARIO HÁBITO 4, 5 Y 6
La importancia de escuchar es ponerte en los zapatos del otro y entender su objetivo, lección que aprendí pero que me costó mucho entender, asumo de alguna forma que parte de mi temperamento y naturaleza en ocasiones me impedía entender el objetivo de los demás y solo quería hacer valer mi propia razón, eso me restaba una visión más amplia de las cosas y además creaba fricciones con mis interlocutores, creo que el saber ganar-ganar es imaginarte el objetivo de los otros y estar preparado para mediar con tu propio objetivo y alcanzar una meta común.
Lo anterior aplicado a esta nueva etapa que estoy experimentando en mi proceso de incorporación al Instituto de Salud, me ha permitido contar con el apoyo de de mis compañeros para entender procedimientos y poderme desarrollar en las funciones que me son encomendadas y alcanzar las metas comprometidas, esto me ha puesto en el proceso de sinergia por el efecto enseñanza aprendizaje y desarrollo de ideas para alcanzar los objetivos.
Lo más importante ha sido incorporarme a este equipo que dicho sea de paso tiene otra visión y tiene mucho que ver, además gracias al trabajo en equipo, los objetivos se han podido concluír, y los resultados son los esperados.
Buena noche
Hilario Víctor Ayala Vázquez
Hábito 4
Ganar/ganar
En lo personal, tengo muy claro que en la mayoría de las situaciones personales y de trabajo, debo pensar en compartir tanto el trabajo como los resultados, lo cual lleva de la mano a que se presenten las situaciones de ganar/ganar, generando relaciones satisfactorias para ambas partes con las interacciones, sin duda el ayudar a los demás a conseguir lo que buscan genera cierta empatía y cooperación en este tipo de relaciones.
Cuando no se dan las relaciones de ésta forma en alguna de las partes se genera un sentiemiento de perdida o derrota y cierra el camino para posibles opciones a futuro o en los casos extremos de perder en ambos casos, puede generar hasta rencores o enojos que seguramente no permitiran alguna relación a futuro, cenrrando cualquier oportunidad de beneficio.
En mi esxperiencia laboral ha sido mas sencillo realizar cualquier tipo de negociación cuando tengo muy claro la forma en que yo resulto beneficiado y también la forma en que los demás tengan un beneficio de la negociación en particular, solo de esa forma puedo estar consiente de hasta donde puedo llegar y negociar con bases firmes.
Hábito 5
Comprender y ser comprendido
De cualquier forma que he querido hacer las cosas, me ha resultado indispensable entender primero lo que quiero y posteriormente darlo a conocer para tener la seguridad de que me entienden los demás y después tratar de entender lo que los demás quieren o buscan.
En varias ocaciones he tenido que realizar negociaciones, principalmente ahora que estoy en el ambiente laboral o de relaciones laboreales, ya que cuando la gente acude por alguna situación, trato de entender claramente el problema o la situación para posteriormente ofrecer una solución o respuesta y me aseguro de siempre dejar las cosas muy claras para no generar falsas espectativas o respuestas vagas que puedan generar confusiones, sobres todo en el ambiente laboral, que existen tantas disposiciones normativas que limitan en ocasiones la solución de problemas de forma sencilla, por eso trato siempre de entender la situación claramente y posteriormente dar una respuesta o solución igual de clara, sustentada y soportada normativamente.
Hábito 5
Sinergias
Las sinergias generan empatía, por lo tanto facilitan el trabajo en equipo y la obtención de resultados sobre el mismo fin. Estas sinergias son vitales en cualquier ambiente laboral, ya que se debe generar la cooperación de todos para trabajar hacia el bien común, aunque en ocasiones lo mas díficil es influir en los demás de manera positiva para poder generar ésta cooperacìón y perseguir el bien común.
Con mi equipo actual de trabajo, me ha costado un poco identificar, coordinar y dirigir esos esfuerzos hacia el bien común, en parte por el poco tiempo que llevo en ésta área y debido principalmente a que los antecedentes del área no son de lo mejor, ya que no existía esa relación de compartir ideas, objetivos y principios, pero por lo menos el dejar claros los principios y bases del trabajo me han permitido empezar a direccionar los esfuerzos hacia el trabajo en equipo y el bien común, aunque la integración sea lo mas díficil pero estoy seguro que con los resultados, poco a poco se verá la participación de todos y sin duda se agregaran para poder generar esas sinergías que permitan un buen desarrollo y resultados satisfactorios para el área.
Saludos y gracias
LEOPOLDO MORALES PALOMARES
HÁBITO 4 GANAR/GANAR
Hace algunos años trabajé en una planta industrial, en la cual en la cual cumplir con la visión y misión para la producción y atención oportuna de los clientes implicaba que la producción no tuviera contratiempos o interrupciones, operábamos los 365 días del año las 24 horas del día. Ahí usábamos mucho el ganar/ganar con proveedores, que entendieran que ellos nos ayudaban a cumplir nuestras metas y ellos ganaban, seguíamos produciendo y vendiendo y ellos seguían siendo proveedores y ganaban cada vez más. La organización de las diferentes empresas era la de a mayor colaboración mayor ´participación en una relación donde todos ganan nuestras metas eran sus metas nuestros triunfos eran de ellos, pero también las fallas eran de todo el conjunto, todos éramos responsables.
HÁBITO 5 PRIMERO COMPRENDER Y DESPUÉS SER COMPRENDIDO
No fue fácil, el camino fue largo para llegar a comprender cada quien sus necesidades que eran básicas para poder entregar todo su experiencia y trabajo con el fin de realmente ganar/ganar por todos. Los proveedores siempre quieren dos cosas vender y cobrar, pero las empresas siempre tienen limitaciones financieras. Razón por lo que este hábito como dice Covey en realidad era el primero para poder materializar el ganar/ganar. Era indispensable comprender al proveedor en sus necesidades de ventas y cobros, así como de atención, recepción de productos, análisis de calidad, entradas, etc. Para que él se sintiera parte y por ende ganador, después era más fácil que el apoyo y oportunidad, crédito y calidad nos las cumpliera para poder realizar la producción oportunamente.
HÁBITO 6 LA SINERGIA
La sinergia para mi es el camino en el cual se van moldeando los hábitos 4 y 5, es decir todas las energías, entusiasmo, disposición y sobretodo el convencimiento de los demás para llegar a decir que existe una relación de ganar/ganar es un camino en donde convergen los intereses y con ello logramos sinergias que a mi punto de vista potencian las acciones y actividades que se realizan con un fin común.
CUARTO HÁBITO: Pensar en ganar/ganar
Tanto en mi vida personal como en la laboral siempre he llevado en práctica ganar/ganar. Siendo aún hija de casa, tengo que acatar las reglas que ponen mis padres, para poder pedir un permiso necesito hacer algo para obtenerlo, ayudando con las labores del hogar, estando con ellos algunos fines de semana y yo doy un plus aportando económicamente con gastos de la casa. En la vida laboral, lo aplico llevándome bien con todos mis compañeros y ayudándoles a lo que se les ofrezca, porque yo también necesito de ellos y siempre me han apoyando con lo que necesito. Respecto a mi jefe, he tratado de entregarle el trabajo que me solicita en tiempo y forma, cuando se me presenta algún imprevisto y tengo que faltar, siempre negociamos, ya sea que yo recupere el tiempo o el dejándome actividades extra.
QUINTO HÁBITO: Procure primero comprender, y después ser comprendido.
Muchas veces al querer obtener un permiso de mis padres y ellos no me lo otorgaban, había discusiones, peleas y disgustos, por no saber la razón que ellos tenían al no dejarme salir o hacer algo que quería por lo que un día opté por preguntarles sus razones para no dejarme hacer algo que quería, si yo ya había cumplido con todo lo que habíamos acordado, sus razones fueron por simple protección y porque quieren prevenir que me llegue a pasar algo malo, les expuse que nadie está exento de las cosas malas; se que previniendo se pueden evitar adversidades, pero cumpliendo con horarios, actuando responsablemente y con madurez las cosas salen bien. Es como de esa manera logramos dar nuestros diferentes puntos de vista y entender lo que quería cada uno.
SEXTO HÁBITO: La sinergia
La sinergia se lleva en la familia o en una organización, está se da con los hábitos anteriores. En la oficina existen personas con diferentes puntos de vista e ideas, eso es lo que hace interesante las relaciones, siempre y cuando exista el respeto en las opiniones de cada uno. No tiene porque haber conflictos con lo que cada uno expresa, al contrario de cada cosa negativa hay que verle el lado positivo. Existe una frase que me gusta mucho… “un optimista es aquel qué ve oportunidades en cualquier dificultad”.
Antes de trabajar en el ISEM, trabajaba en una Supervisión Escolar de Educación para Adultos. La plantilla docente estaba conformada en su mayoria por profesores y profesoras de más de 50 años. Al estar elaborando el plan de trabajo de un nuevo ciclo escolar, les planteamos (el Supervisor, el Auxiliar,los profesores más jóvenes y yo) la posibilidad de cambiar la forma de dar la clase.
En un principio se negarón rotundamente; eschuchamos comentarios como:"para que si así estamos bien", hasta "ya estamos viejos para trabajar de otra forma".
Les explicamos las necesidades de requeria el servicio, que cada vez asistian a la escuela de adultos jovenes entre 15 y 20 años y que era necesario actualizarse.
El dialogo se fue abriendo hasta llegar a la conclusión de que no se sentian seguros y preparados para atender a esos jovenes.
Les ofrecimos un curso de actualización y asesoria permanente la cual aceptaron. Ese ciclo escolar se aumento la matricula de alumnos.
Ahora veo reflejada esa experiencia con los habitos 4, 5 y 6.
Mario Aguilar
Hugo Rosales Basurto
(Habito 4) Una de las máximas sobre las que he sustentado gran parte de mis actos al interactuar en la dinámica social es la referencia quijotesca que dice: “…dichosa edad y siglos dichosos aquellos a los que nuestros antiguos denominaron dorados y no por que en ellos el oro que en nuestra edad de hierro tanto se estima se persiguiera en aquella venturosa sin fatiga, sino por que en aquella santa edad las palabras tuyo y mío no existían, en aquella santa edad todo era común…” Así he determinado que la única forma en la que puedo potenciar el líder que busco ser, no es imponiendo sino por el contrario compartiéndome con mis semejantes, comenzando por darles el trato que quiero recibir a mi familia y a la gente que depende de mi dentro del campo de mi responsabilidad laboral ya que de inicio he comenzado por lo mas sencillo, cuando busco que la gente me sonría por delante les obsequio una sonrisa, un saludo y de inmediato les pregunto que tal va su día, lo he puesto en práctica con la gente que hace la limpieza en mi oficina, con la gente que cubre la vigilancia y de la misma forma con los colaboradores operativos de la subdirección a mi cargo y el resultado ha sido increíble pues he trascendido varios paradigmas ya que en la dinámica de trabajo he variado la estrategia de llamar a mi oficina a mis jefes de departamento y he optado por ser yo el que baje o los visite en sus oficinas para abordar los temas de su competencia y pidiéndoles que propongan mecanismos para optimizar nuestros procesos y generar que nuestros aliados operativos ganen un espacio de trabajo en donde se sientan a gusto y consecuentemente tengamos también la ganancia de terminar las jornadas laborales en tiempo y forma evitando el trabajo extra por retrasos, ya que al final del día no es mi trabajo sino el resultado de nuestra labor en equipo.
(Habito 5) Otra gran experiencia ha sido poner en práctica la dinámica de la comunicación asertiva bajo la filosofía maya de que los otros son lo mismo que yo en otra piel, centrándonos en escucharnos unos a otros pero no desde lo superfluo sino desde lo emocional pues he descubierto que en ocasiones no son las actividades que les asigno las que les generan molestia a mis colaboradores, sino el modo y la forma en la que se los pueda pedir y más aún la atención que ponga en sus comentarios, sugerencias o simplemente en una palmada en el hombro, una sonrisa y el mostrar interés sobre el hecho de que en su vida todo este funcionando de manera optima, simplemente aplicar aquella sentencia de San Francisco que reza: “…Que no me empeñe tanto en ser comprendido como en comprender…”
(Habito 6) Finalmente Alejandro Dumas no se equivocó en heredar el mítico “…uno para todos y todos para uno…” ya que al poner en práctica esta dinámica en la que mis jefes de departamento han entendido este mensaje colgado en la puerta de mi oficina, ha quedado claro que individualmente puedo ser muy competitivo y capaz; pero que si sumo a mi talento la extraordinaria capacidad de cada uno de ellos, mis posibilidades y las de ellos se incrementan ya que si ellos crecen yo crezco, tal como lo refiere el libro de la sabiduría cuando le dice la gota de agua al lago: “…ahora voy a entregarme a ti y nos haremos mas grandes…”
4to Hábito
Es de suma importancia comprender el “ganar-ganar” para tratar de hacerlo nuestro en todo tipo de decisiones.
A pesar de que para algunas situaciones dicho equilibrio pareciera dejar de ser el más atractivo porque representa un mayor beneficio el “gano-pierde” (como el famoso Dilema del Prisionero en Teoría de Juegos), en la mayoría de los casos y en el largo plazo termina siendo la mejor decisión tanto individual como colectiva el buscar “ganar-ganar”.
Por lo tanto trato, tanto a nivel personal como laboral, comprender el problema, la coyuntura y los participantes para acercarme tanto como sea posible al “ganar-ganar”.
5to Hábito
Tanto en el trabajo como a nivel personal la comunicación es pilar fundamental sobre la que se sostiene parte sustancial del resultado de nuestras acciones y resultados. Por tal motivo considero primordial ejercitar día a día esta habilidad para comunicar de manera efectiva y siempre escuchando a tu contraparte en todo tipo de relación.
6to Hábito
El reto se encuentra en armonizar el todo, esto es, poner en práctica e interrelacionándose entre sí los hábitos anteriores para lograr la sinergia de la que habla Covey en el 6to hábito.
Manuel Marcué
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