jueves, 15 de septiembre de 2011

Primer Comentario Maestría Administración - Liderazgo


Un verdadero gusto haber compartido con todos ustedes nuestra primera sesión. Comienza un viaje extraordinario hacia nuestro interior donde recordaremos, viviremos y espero muy sensiblemente gozaremos en espera de un desarrollo personal y de nuestras habilidades no sólo de liderazgo si no como seres humanos.

Sean bienvenidos!!

Un abrazo

Enrique

13 comentarios:

Mariana Granados dijo...

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Mariana Granados
Las lecturas de Goleman y Senge me recordaron mucho a una película llamada "El Secreto" pues en ella se tocan puntos que las lecturas mencionan, uno de ellos es el dominio personal considero que se ésta disciplina es el punto de partida para generar una organización enfocada al liderazgo, comenzar desde la visión de uno mismo es la base para poder interactuar con las demás personas en diferentes ambientes y manejar la inteligencia emocional para conseguir los objetivos planteados por cada persona y organización.Claro que el dominio personal no siempre es comprendido por todas las personas, por lo cual el concepto de inteligencia emocional no actúa como debiera para alcanzar las metas deseadas, es importante desde este sentido enfocar nuestros pensamientos y deseos a lo que realmente queremos y estar en sintonía con esto pues al tener una visión clara a la cual dirigirnos no hace falta nada más que realmente sentir como si ya tuviéramos lo que deseamos para que en un futuro se haga realidad, esto es lo que se ha intentado realizar con las visiones de las empresas pero si ésta no esta acorde a las de los empleados no se puede lograr.
Es esencial conocer los deseos y visiones de los empleados para que se les ubique en un área de la empresa donde puedan sentirse productivos y felices de realizar las actividades en un empleo, para ello la organización puede inclinarse por instituir una filosofía más que visionaria, espiritual y apoyar a la felicidad del empleado de esta forma.
Considero que los tiempos actuales en donde la tecnología absorbe gran cantidad de nuestro tiempo las habilidades sociales de las personas han disminuido, sin embargo considero que estas personas pueden mejorarlas con cursos de liderazgo, etc. para desarrollar la inteligencia emocional, y además de contar con alto coeficiente intelectual tener habilidades de inteligencia emocional.
Les recomiendo ver la película que les comento al principio de mi comentario, al juntarla con las lecturas nos da un entendimiento mejor para lograr los objetivos planeados personal y organizacionalmente.

Víctor Flores dijo...

La tendencia de las organizaciones de apreciar más que los conocimientos y la experiencia las cualidades personales como la empatía, adaptabilidad, entre otras, es evidente y se comprueba en sus procesos de contratación, concursos de becas, ascensos y cursos de empowerment para los empleados. De esta manera, las organizaciones pretenden garantizan mejores trabajadores. Un ejemplo de esto se da en Telefónica Ecuador donde trabajé. En las entrevistas y concursos para becas, se contrata a una empres que pone a los participantes en situaciones reales. Así, dan la oportunidad de evaluar esas habilidades personales de cada uno, donde se evidencia el liderazgo, en la manera que los participantes resuelven los problemas planteados, toman las decisiones y logran la persuasión de los demás miembros del grupo. En el caso del empowerment se dictaba un curso de “Gerencia de Logro” por Galo Pozo que permitía motivar a los empleados y descubrir esas habilidades para posteriormente potenciarlas.

Así mismo, si hablamos de inteligencia emocional, las empresas grandes suelen fomentar el desarrollo de sus empleados en este punto, a través de los propios jefes, quienes realizan sesiones de feedback, donde se evalúan sobretodo, los que suelen llamar “competencias” que son e parte, las cualidades que permiten conocer el nivel de inteligencia emocional. El jefe evalua el desempeño del empleado en el trabajo y obtienen una calificación por “competencia”. Como parte de los objetivos y la calificación del empleado, se busca que sus puntajes mejoren constantemente. Con esto, la organización no solo garantiza un seguimiento a sus empleados para mantenerlos motivados viendo que la organización se preocupa por su desarrollo profesional, sino que también garantizan mediante este crecimiento mejorar su desempeño y por lo tanto el de la organización, convirtiéndola en más competitiva. Hablando específicamente de las habilidades que demuestran un desarrollo de la inteligencia emocional, quisiera mencionar el caso de un trabajo en donde tenía dos jefes. El uno era persuasivo y sabía la forma de pedir las cosas de tal manera que generaba en sus subordinados empatía, aún cuando el trabajo era intenso, los empleados lo hacía con gusto. El otro por el contrario, era autoritario e imponía las cosas, los problemas solo los enfrentaba con enojo y gritos, lo que evidentemente produjo desmotivación en algunos empleados y miedo en otros lo que a la final repercutía en los objetivos del área los cuáles no se cumplían y tenía más problemas con sus superiores.

Muchas veces se menciona que existen conocimiento adquiridos en la carrera o en una maestría no los aplicas nunca. En parte, podría tener algo de verdad. Se puede decir más bien que las instituciones educativas a cualquier nivel ayudan a entregar las herramientas y da inicio a adquirir ciertas habilidades como responsabilidad, trabajo en equipo, empatía con las personas, etcétera, mientras que ya en el mundo laboral estas habilidades se potencian aún más con el trabajo diario y la práctica. Finalmente, si estas dos partes se combinan son sinónimos de excelentes empleados que logran esto gracias a su constante motivación y disciplina. Los empleados que poseen están características no tiene miedo al cambio y toman decisiones, buscan oportunidades y las enfrentan. Por el contrario, aquellos que no tiene claro lo que verdaderamente les interesa y no tienen una motivación personal, pierden sus mayores inspiraciones y caen en la falta de enfoque, en el estancamiento profesional y personal, en el arrepentimiento de lo que no se hizo. He visto en ocasiones y me ha pasado, que pasamos mucho tiempo trabajando en el día a día, pagando fuegos o haciendo lo mínimo y no pensamos bien en lo que es importante, en lo que queremos lograr en el trabajo y como llegar a ello. Lamentablemente llegamos a desmotivarnos completamente y a veces a tocar fondo para nuevamente evaluar nuestra situación actual y decidir qué hacer con nuestras vidas. Todo esto con referencia al dominio personal que menciona el autor.

Anónimo dijo...

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Elena Gómez

He formado parte de dos procesos de selección para entrar a laborar a una empresa. En estás dos empresas pude darme cuenta “dan por hecho” que tienes los conocimientos suficientes para el puesto vacante, por lo tanto las entrevistas tenían que ver con los valores, habilidades de servicio y de relación con el cliente interno, empatía, personalidad, aptitudes, etc. Mis dos experiencias se basaron en casos, preguntas sobre ¿Qué harías sí?. Cada vez las empresas toman más en cuenta la inteligencia emocional, pasando a segundo término los conocimientos. De acuerdo con la lectura, pienso que es sumamente importante que las personas trabajemos en nuestra inteligencia emocional, la cual nos ayudará desde saber escuchar hasta saber liderar un grupo de personas. Esto es mucho más importante que ser el primero de la clase como lo dice el autor Daniel Goleman, ya aunque seas el más inteligente de todos, si no tienes la habilidad de relacionarte con todas las personas, ser empático y escuchar a los demás, no lograrás nada. En conclusión estas empresas de las que forme parte del proceso de reclutamiento están conscientes que contratar personas “emocionales”, les ayudará a sobrevivir durante el tiempo.

A lo largo del tiempo he observado que muchas personas al inicio se sienten seguros de su trabajo, están muy contentos y dando lo mejor. Sus expectativas son muy claras. La empresa dice que si hacen bien su trabajo, en cierto tiempo podrán ser promovidos, convertirse en empleados de confianza, etc. Las personas comienzan a trabajar arduamente porque tienen deseos de superarse y son fieles a esta. Sin embargo, especialmente en las empresas manufactureras, comienzan a rotar muchísimo al personal, provocando que haya altibajos en su desempeño. Los empleados empiezan a desmotivarse porque no los promueven y no les cumplen ninguna promesa, los cambian de lugar y no les agrada. Esto provoca empleados desmotivados e inseguros de su trabajo. Las personas comienzan a buscar empleo en otras partes “por si acaso”. Las empresas deben cumplir, ya que independientemente de que haya una fila de personas deseando entrar a la empresa, cuando se van se pierden conocimientos. Un empleado contento, estará muy comprometido con la empresa, ayudando a su crecimiento. Por otra parte, un empleado desmotivado no guiará de la misma forma su trabajo y esfuerzo, ya que sólo estará pensando en qué hará cuando llegue el día y lo corran. Esa invasora sensación de que nadie está a salvo, aunque la compañía a la que pertenece sea próspera, lleva a una generalización del miedo, la aprehensión y la confusión.

Un tema que me gustó mucho fue el de “dominio personal”, en la parte de tensión “creativa” y tensión “emocional”. Cuando realicé mis prácticas profesionales, tenía la oportunidad de entrar a juntas de las que mi jefa formaba parte. Estas juntas estaban basadas en mejorar algún aspecto específico de la empresa. El equipo de trabajo estaba muy contento, dispuesto a dar todo para mejora. Se establecieron los puntos clave con objetivos muy claros y razonables. Se dividieron en pequeños grupos, los cuales debían ser responsables de sus tareas. A lo largo del tiempo, comencé a notar que los equipos no realizaban correctamente las tareas. Debido a la gran tensión emocional (que los regañara el director), se redujo la meta planteada. Este fue un gran error, porque como lo decía la lectura, es fácil escapar de la tensión emocional, el único precio que pagamos es el abandono de lo que realmente deseamos, la visión. El equipo de trabajo al alejarse de la visión, logró tranquilizarse por un periodo, pero después se noto la necesidad de lograr el objetivo propuesto al inicio. Es importante que los equipos de trabajo tengan la capacidad de dominar la tensión creativa (comprometerse con la verdad), lo cual genera capacidad para la perseverancia y la paciencia. Al comprometernos con la verdad, seremos capaces de defender nuestra visión, con lo cual lograremos un alto nivel de dominio personal.

Anónimo dijo...

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Diego Angeles


Para mi, la primera idea interesante de esta lecturas es la importancia de la inteligencia emocional, pues se nos menciona que años atrás el conocimiento técnico y la buena preparación aseguraban un futuro esplendido en el mundo empresarial. Sin embargo, hoy en día se toma en cuenta la inteligencia emocional para elegir a las personas que serán parte de las grandes empresas. La inteligencia emocional se refiere, entre otras cosas, al control de emociones, manejo de conflictos, trabajo en equipo y liderazgo.

La lectura nos indica que hoy en día casi nadie tiene el trabajo seguro, y que las empresas buscan a personas realmente efectivas que reditúen a la empresa, y para hacerlo no basta la pericia técnica, sino también al inteligencia emocional. Me sorprende la idea de que actualmente lo aprendido en la escuela es menos importante que todas las habilidades interpersonales y de trabajo en grupo. Es sorprendente como las herramientas que consideramos precisas, como el CI y pruebas de admisión a las mejores universidades, en realidad no tienen ninguna relación con el éxito profesional de las personas .

Al analizarlo de manera detenida, podemos darnos cuenta que sea cual sea el trabajo que desempeñemos, siempre estaremos rodeados de personas; y muchas veces el éxito del trabajo es la sinergia con el equipo más que los conocimientos, pues si se tienen personas talentosas sin ánimo de colaborar, el resultado será pobre. Es por esto que el ser inteligentes emocionalmente nos abre las puertas del éxito, ya que los grandes puestos siempre se basan en el trabajo en equipo con los subordinados.

Otra idea interesante de la lectura es acerca de las organizaciones que aprenden, pues es verdad que hoy en día para que una empresa sobreviva y salga adelante no basta con hacer la cosas bien; se debe retar lo que se sabe e innovar. Esto se puede lograr sólo si las organizaciones incentivan a sus trabajadores a pensar más allá y a proponer nuevas formas de hacer las cosas.

Un punto interesante de la lectura es que cuando convertimos el dominio personal en una actividad innata de la vida, es decir, en disciplina. El contar con disciplina nos ayuda a clarificar lo que es importante para nosotros (no perder nuestra propia misión y visión aunque haya tropiezos en el camino) y también nos ayuda a aprender continuamente. Contar con disciplina supone también ver las cosas con claridad y objetividad, ya que si no sabemos en donde estamos realmente no podremos llegar a donde queremos.

En la lectura se menciona la importancia de la visión personal para poder alcanzar nuestros objetivos, es importante tener siempre en menta para que existimos, cual es el propósito de nuestra vida. Si no tenemos claro que es lo que queremos, será muy difícil trabajar para alcanzarlo. Pienso que crear una visión personal no es nada fácil y se compone de muchas partes, tiene que ser muy bien pensada; pero es sumamente necesaria para saber hacia donde navegar y es especialmente importante no rendirnos en alcanzar nuestros objetivos aunque en el medio haya fracasos (que seguramente los habrá). Es por eso importante que las organizaciones, al momento de definir sus objetivos, traten de empatar estos con los objetivos personales de los miembros del equipo, solo de esta forma los empleados trabajaran en pro de los objetivos organizacionales.

Anónimo dijo...

Betzaida Peña Juárez
I.D. 741189
MA - Sede Metepec

"El Cociente de Éxito se debe en un 23% a nuestras capacidades intelectuales y un 77% a nuestras aptitudes emocionales" (The Consortium for Research on Emotional Intelligence in Organizations).
...Vaya vaya, al parecer es algo que se enseña contrariamente en algunas instituciones educativas, deportivas, artísticas e inclusive en algunas doctrinas religiosas. Lo que me parece aún más sorprendente fue la manera como lo aprendí... cuando estudiaba la licenciatura en la universidad tuve la oportunidad de conocer personas de diversas culturas, ideologías y hábitos a través de diversas actividades estudiantiles. Una de éstas fue el "Programa Guías" donde estuve precisamente como guía en el programa de inducción de nuevos estudiantes que dejaban sus hogares para vivir la experiencia universitaria por los años que durara la carrera. En este grupo conocí a la primera persona que hacía uso de sus aptitudes emocionales en favor de si mismo y de los demás... porque definitivamente no era el estudiante más sobresaliente de su carrera... mmmm es más llevaba un año y medio de atraso en relación a su generación; sin embargo sus aptitudes le llevaron a trabajar con gente allegada al gobernador del estado, con el rector de la universidad de aquél tiempo e inclusive a ganar uno de los trabajos más codiciados por los estudiantes economistas de aquellas generaciones. Actualmente es un empresario exitoso, un maravilloso esposo (palabras de su esposa) y un excelente amigo... no cabe duda... no importa que tan "nerdo" seas, tus aptitudes emocionales pueden desprestigiar o fortalecer tu IQ.

El dominio personal requiere un pensamiento sistémico por lo que es uno de los retos más interesantes a vencer. Sobre todo en el plano del hábito y la autodisciplina. Lo difícil esta en hacer que la mente se aquiete por un momento. Es impresionante la cantidad de pensamientos por minuto que puede generar la mente, lo pesado es enseñarle a generar pensamientos distintos a los que está acostumbrada generar. Por qué lo considero un reto... porque primero, para crear el hábito de la meditación se requiere practicarla por 21 días continuamente y segundo porque la mejora en la calidad de la práctica permite mayor quietud mental para crear.

Se dice fácil pero "volver el espejo hacia adentro" para darle objetividad a la subjetividad de la mente requiere dominio y pericia. Es decir, se necesita del hábito en la conciencia de nuestros pensamientos, sentimientos y acciones... algo que por cierto clarifica de una manera peculiar el Dr. Miguel Ruíz en su libro "La Maestría del Amor"... Sin embargo, considero que se podrá leer mucho pero mientras la práctica coherente no superé la teoría, el ser humano seguirá limitado en su poder creativo.

Anónimo dijo...

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Doris Calle L.

Los seres humanos invertimos gran parte de nuestra vida preparándonos para poder desempeñar un buen papel cuando sea el momento de trabajar, sin embargo esta preparación se centra en conocimientos técnicos que actualmente son considerados parte del desempeño óptimo de los trabajadores y no su totalidad; es entonces que se empieza a buscar ¿cómo complementar estos conocimientos? Y la respuesta es, con el manejo adecuado de nosotros como personas y con los demás. La inteligencia emocional no es tan sólo ser simpático con todos, es saber llegar a las personas no solo para agradarles sino para ayudarles a desarrollarse, percibiendo sus necesidades y fomentando sus aptitudes, es decir SER LIDER.

Llamó mucho mi atención la importancia de conocerse a uno mismo para poder transmitir seguridad y confianza al grupo al que se pretende llegar. Según Goleman la aptitud emocional es dos veces más importante que las facultades puramente cognitivas y lo he verificado en el día a día en el trabajo, en donde gente exitosa no es necesariamente la más brillante o la que más domina determinado tema, pero si es gente que identifica capacidades de otras personas y las potencializa en el momento adecuado y esto me recordó un comentario de un profesor de marketing de la carrera que nos repetía que nosotros para las empresas somos un producto y como tal debemos saber venderlo; como el granjero que produce tomates y es experto en eso, pero el comerciante es quien más gana en la venta del producto.

La inteligencia emocional pone al descubierto nuestro potencial para ejercer habilidades prácticas y personales que a veces hasta ignoramos, para ello es necesario primero reconocerlas, y conocernos para en función a esto establecer nuestros límites y saber que nos motiva y con esto poder incluso poder prever reacciones personales que pueden repercutir en el resto. El líder en vital en el desarrollo de un equipo y en el recae mucha responsabilidad porque de él depende en gran parte el trabajo de sus miembros, me gustó mucho la frase de “La ineptitud de los lideres reduce el desempeño de todos” porque el líder es quien marca el paso y en base a él, el equipo toma ritmo, consecuentemente puede potenciar a las personas o limitarlas; en él está el hacer más agradable el trabajo o complicarlo al punto de auto sabotearlo.

Actualmente las empresas ponen mucho empeño en la búsqueda de estas habilidades y ya no solo de conocimientos, no creo que porque les interese únicamente desarrollar al empleado, es también porque eso se ve reflejado en los resultados económicos, en el largo plazo, cuanto más se practique las virtudes eminentes de la vida, más éxito monetario tendremos y el impacto que el desarrollo personal pleno puede tener en la felicidad individual vale más que lo reflejado en un sueldo. Tuve la oportunidad de trabajar en una empresa que no proporcionaba los mejores sueldos, ni buenas prestaciones, pero sabían muy bien del “pacto” del que habla Herman Miller entre la organización y el individuo, en donde el contrato ni el sueldo importaba, porque existía un compromiso de verdad que era desarrollar a las personas y hacerles sentir que lo estaban haciendo independientemente de otros factores.

Finalmente me gusto el ejemplo del bebe de seis semanas que aún no parece conocer sus manos y sus pies, pero es consciente de ellas aún cuando no sabe utilizarlas ni sacarlas ventaja, considero que es lo que nos pasa a muchas personas con las habilidades interpersonales ya que todos las tenemos pero el éxito está en los que saben aprovecharlas.

Anónimo dijo...

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Mauricio Velasco

Me pareció muy interesante la lectura de Goleman, al momento de revisar las ideas del autor pude viajar por algunas de las etapas de mi vida laboral, recordando a las personas que han dejado algún aprendizaje en mí. La primera idea que me resultó provechosa es la de la importancia de saber reconocer las emociones de los demás. Creo que la gente que lo logra y además tiene la “pericia” necesaria puede lograr con mayor facilidad sus objetivos, en algún momento de vida profesional me tocó conocer a una persona que podría considerar un “maestro” en inteligencia emocional, sin embargo el uso que le daba a la facilidad para detectar las emociones de los demás y controlar las suyas era terrible, solamente la utilizaba para beneficio propio y para destruir a quienes no le agradaban, me tocó ver a muy poca gente que pudiera lograr algo con el, muchas personas perdieron su trabajo y la empresa tardó mucho tiempo en reconocer que no debía estar en la organización, personalmente tuve muchas dificultades para entender como tratar una situación de este tipo y creo que fueron mis primeras lecciones de la vida sobre el tema de inteligencia emocional, yo mismo me sorprendí cuando cambié totalmente mi estrategia de discutir cada vez que tenía que tratar algo con esta persona, por una estrategia totalmente amable de mi parte y con respuestas positivas, lo cual dejaba desarmada a esta persona totalmente, al menos por un tiempo.

Otro de los aprendizajes que nos da el tiempo es al que se refiere Goleman cuando menciona que las emociones descontroladas pueden hacer estúpido al inteligente, normalmente todos pasamos por situaciones de mucha presión durante nuestro desarrollo profesional, cuando ocurren estas circunstancias de manera periódica vamos aprendiendo a sobrellevarlas con mayor control, pero siempre habrá situaciones nuevas que nos pueden provocar crisis emocionales, creo que es de gran utilidad buscar ser siempre un apoyo para que la gente nueva pueda superar estas situaciones y aprender de ellas, la idea es hacer que los participantes en una reunión se enfoquen en el proceso y no en el individuo.

En cuanto al capítulo nueve de Peter Senge, me gustó el concepto de la madurez avanzada, donde se habla sobre la capacidad para la gratificación demorada y creo que es una habilidad que se ha perdido en una gran medida. En los últimos años me ha tocado ver gente que se desespera demasiado rápido por la falta de recompensa por un buen desempeño en el trabajo. Creo que mucha gente hoy busca una reacción inmediata que las organizaciones no han podido lograr. Inclusive mucha gente busca hoy la gratificación adelantada, recuerdo siempre a una persona que era mi subordinado en el trabajo, en una sesión de retroalimentación le hice la observación de que debería estar dispuesto a realizar un mayor esfuerzo en los proyectos nuevos y quizá ocasionalmente regalar unos minutos de su tiempo cuando de ello dependía que el proyecto se lograra a tiempo, su respuesta fue “si yo ganará lo mismo que tú, seguro me quedaba hasta las 8 de la noche diario”, esta respuesta me llevó a preguntarme ¿qué diferencia hubo en mi jefe, quien si lograba que yo y otros compañeros supiéramos que había que esforzarse por una recompensa a futuro? Creo que las organizaciones deben trabajar para recuperar la confianza que ayude a los individuos a pensar que sus esfuerzos son una inversión que generará recompensas a mediano y largo plazo.

Anónimo dijo...

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Alejandra Campuzano

Al leer los capítulos de Goleman y Senge, me pareció muy interesante el poder saber aspectos nuevos de los cuales las empresas o el mundo actual busca en las personas.

A pesar de no contar con experiencia laboral hasta el día de hoy, a diario se sabe por amigos o conocidos la forma en que las empresas buscan o reclutan a su personal. Ha cambiado mucho esta manera de hacerlo y ahora usan técnicas diferentes. Algunas de estas técnicas nuevas son examenes no sólo de razonamiento sino examenes de personalidad, si así lo queremos ver. Fue el caso de la empresa P&G en la cual tuve la experiencia de participar en uno de sus reclutamientos para becario. La primera etapa y primer filtro es el examen de habilidades y actitudes personales, el cual para muchas personas no es de vital importancia porque las preguntas son muy "obvias". sin embargo, es el filtro en el cuál la casi el 90% de la gente se queda fuera. De ahí viene un examen de razonamiento para continuar con 2 entrevistas, 1 con un empleado y la última en un panel con gente del área de interés.

Es claro como las empresas han ido dándose cuenta que lo importante en las personas no es sólo los conocimientos o estudios que la persona adquirió, sino el potencial, o inteligencia emocional que esa persona tiene para poder dar valores agregados a las compañías.

Creo que este tipo de inteligencias van muy relacionadas con la cultura que las personas tienen ya sea en un país, región, o educación. Las actitudes estrella que las personas tienen no sólo forma parte de su carácter o educación sino también de la cultura desde mi punto de vista. Pienso que es muy diferente el buscar personas con ciertas actitudes en diferentes partes del mundo, aunque esto no pueda ser generalizado.

Una frase que me gustó mucho del libro de Senge fue "Las organizaciones inteligentes son posibles porque en el fondo todos somos aprendices", esta frase fue la que más me quedó grabada además que la que más impacto tuvo sobre mí. Me parece totalmente cierto el decir que todo lo posible es precisamente eso, posible. Como dice el libro, las personas somos por naturaleza deseosos de aprender, además de que no se nos tiene que enseñar a aprender, es algo que no nos tienen que enseñar. Me pareció totalmente cierto, pienso que las personas somos capaces de realizar cosas que ni si quiera imaginamos. Años atrás seguramente nadie creyó que se podría ver la televisión no sólo a color y en tiempo real, sino que ahora se puede ver televisión por internet en casi cualquier lugar del mundo sin necesidad de tener un televisor. Esto es un ejemplo muy mínimo de lo que las personas somos capaces de realizar en la manera en que se desee. Por eso, es que las organizaciones cada vez son más inteligentes, y buscan a las personas adecuadas con las actitudes e inteligencia deseada, con el objetivo de ser cada vez más competitivos.

Finalmente, puedo decir que ahora parece ser que la educación claro que es importante, ya que sin estudios no se puede aspirar a puestos que uno desea. Sin embargo, los estudios no son suficientes hoy en día. Es tal la competencia y los cambios en lo que las organizaciones buscan que es obligatorio tener un diferencial, algo que marque a las personas como diferentes y además aptas para la organización. De esta manera, las persona adecuadas generarán valores agregados únicos y la empresa será igualmente mejor. Sin embargo, este tipo de cambios no ha sido sólo en las compañías sino en la vida diaria.

Anónimo dijo...

A01100029
Alejandra Campuzano

Al leer los comentarios de mis compañeros me parecen muy interesantes. Un poco de lo que llama mi atención es al leer el comentario de mi compañero Mauricio, el cual me parece muy interesante el leer lo difícil que es trabajar con personas. Al leer su experiencia es claro que los seres humanos somos difíciles de manejar, ya que tenemos muchas habilidades, actitudes e inteligencia que pueden dar resultados sumamente positivos, pero de la misma manera dependiendo de la manera en que se manejen pueden llegar a ser negativos. Todo depende de la manera en que se use.

Los conocimientos adquiridos en la escuela los puede aprender casi cualquier persona si se lo propone. Sin embargo, los conocimientos reales al salir y convivir con todo tipo de personas, de todos los niveles es lo que realmente da la experiencia y los verdaderos retos de aprendizaje.

Anónimo dijo...

Mauricio Velasco

Al leer los comentarios de varios de ustedes, me he dado cuenta de que es una realidad el que las organizaciones han cambiado. Si hoy graficara en una linea de tiempo la cantidad de cursos dedicados a la parte humana del empleado desde lo que me ha tocado vivir, creo que esta iría en aumento contínuamente.

Creo que la parte más dificil siempre será tener un interés genuino de grupo, ya que cuando este interés es fingido y esconde las mismas ambiciones de siempre tendrá un efecto poco duradero.

Anónimo dijo...

Hassan Ortiz
A01050934

Al leer los comentarios de todos, creo que la mayoría empatamos en el tema que se refiere a inteligencia emocional en donde todos hemos ya vivido una situación real y nos damos cuenta que efectivamente, las empresas han detectado que para tener un empleado exitoso no sólo basta con los conocimientos técnicos, sino que para asegurar un desarrollo pleno dentro de una organización, equipo o sociedad se requiere aumentar nuestra inteligencia emocional. Por eso espero podamos irla trabajando día a día para hacer de ella una costumbre y después una actividad inconsciente como señala el autor en sus líneas.

Anónimo dijo...

1050970
Diego Angeles


Lo que puedo concluir al haber leído las aportaciones de mis compañeros es que todos pudimos identificar la importancia que los dos grandes conceptos tienen en la vida profesional, por un lado tenemos el autodominio y por el otro la inteligencia emocional. A través de distintos ejemplos vivenciales se puede observar que hoy en día las empresas reclutan a personas pensando mucho más en sus actitudes y habilidades emocionales que en su dominio técnico (al menos a ciertos niveles), esto se da porque el conocimiento técnico puede aprenderse, sin embargo la inteligencia emocional es lo que realmente define a una personas y puede ser clave para que sea o no exitosa en cierta empresa.

Otro punto en común que encontré en los comentarios de mis compañeros es que todos externan su preocupación por el empleado como individuo, se menciona que la empresa en cierta medida es responsable de potenciar las habilidades personales y que los gerentes también deben ser inteligentes al momento de entrenar y motivar a los empleados, pues de esto depende que sean eficientes y reditúen a la empresa.

Anónimo dijo...

Hassan Ortiz
A01050934

Los 3 puntos importantes que yo resaltaría de las lecturas de Goleman y Senge son: La nueva tendencia que buscan los empleadores: inteligencia emocional. Importancia de la pericia en la resolución de adversidades y finalmente el dominio personal como una disciplina.

Con respecto al primer punto, es claro como ahora las empresas buscan nuevas habilidades en la gente a la cual desean que formen parte de su equipo. Hace algún tiempo, tuve la oportunidad de participar en un proceso de selección para una empresa. Y lo que me llamó la atención precisamente fue que a la parte académica (calificaciones, promedio, etc) no le dieron tanta importancia como a la parte de inteligencia emocional. Por un lapso de no menos de 2 horas, el proceso se centro en formar grupos de aspirantes para que resolvieran un caso real. Y en ello, se baso la evaluación por parte de los reclutadores, ed decir, en cómo los aspirtantes se desenvolvían, que herramientas de comunicación utilizaban y como era su comportamiento en general durante la resolución del caso. Que al final de cuentas yo considero esa parte es la que más utilizas cuando te enfrentas a una situación real dentro de una organización.

Para continuar, el punto del segundo dominio, la pericia, me recordo a lo que una vez un empleador comentaba: ahora lo que buscamos de los empleados es a que resuelvan los problemas, a que tengan la capacidad de resolver problemas por sentido común, en pocas palabras queremos a personas activas, con iniciativa, capaces de sobrellevar situaciones dificiles que sin duda siempre las habrá en el ambiente laboral.

Y por último, creo importante como comenta el autor Senge, de hacer del dominio personal una actividad diaria para poder establecer una visión personal, fijarnos muy bien de nuestra situación real y ayudarnos de la tensión creativa para cumplir con los objetivos que nos hayamos establecidos dentro de nuestra visión. Es lamentable como mucha gente deja escapar una oportunidad de logro, de reconocimiento y de éxito precisamente por darle mayor importancia a esa brecha que existe entre la visión y la realidad.